Cuando tenía un año y siete meses, la vida de Kennedy (16) cambió para siempre. Es que Paulina Karadagian (51), hija del legendario titán, Martín Karadagian, tenía un deseo muy fuerte: ser madre. Y lo cumplió cuando viajó a Haití y tuvo en brazos a Kennedy y a Khaled, dos bebés que se llevaban tan sólo dos meses de diferencia, y a los que finalmente pudo adoptar.